La Gran Decisión

El matrimonio es una institución divina que debe durar toda la vida, y los contrayentes deben entender esto. Es una decisión trascendental y una de la mas importantes y cruciales.

Contraer matrimonios “desdichados” o “destruir la felicidad de una mujer o enfriar las aspiraciones y paralizar las energías de un hombre”, constituyen un riesgo que los jóvenes y personas que aspiran casarse deberían considerar seriamente.

El impacto del matrimonio llega hasta la eternidad. Vida eterna juntos y esto es algo que trasciende las edades y la capacidad humana de entenderlo. Los contrayentes deben entender que Dios debe aprobar su conducta y sus planes de casamiento.

Uno de los diez mandamientos del noviazgo para contraer matrimonio dice: “No agarres lo que primero se te aparezca” en otras palabras: ¡Tranquilo! ¡Tranquila! ¡No hay prisa! El matrimonio debería ser una delicia, para disfrutarlo toda la vida, y no un trago amargo. Los novios deben pensar en la influencia del hogar que conformarán, en los hijos que vendrán al nuevo hogar y en los desafíos que enfrentarán. Si yo hubiese leído detenidamente este blog hace 28 años, me hubiese ahorrado muchos sinsabores y le hubiera ahorrado muchos más sinsabores a mi esposa.

 Hay varios factores vitales en la elección:

1.     Los novios deben considerar los sentimientos y observar todo desarrollo del carácter de su futuro esposo o esposa.

2.     Hacer un análisis cuidadoso a ver si existe la alta posibilidad de ser feliz en el matrimonio.

3.     Están a punto de iniciar un viaje juntos para formar un hogar con hijos, y deben pensar si serán capaz de formar a sus hijos de manera integral, y ejercer una influencia espiritual y moral que formara su carácter. No solo deben pensar en lo físico y en suplir los alimentos para sus hijos.

4.     En la elección de la pareja también se debe tener en cuenta, no solo la atracción física o el sentimiento. Debe ser una elección racional. Pensar en el aspecto intelectual, espiritual, moral. Todos unido integralmente.

 Características de los novios:

 La novia:

1.     Debe ser una mujer que este dispuesta a acompañar a su esposo toda la vida y ejercer una noble influencia en él.

2.     Que sea capaz de proporcionar felicidad a su esposo.

3.     Paciente y cuidadosa.

4.     Detallista, amorosa y generosa.

 El novio:

1.     Dignidad.

2.     Nobleza.

3.     Pureza.

4.     Amor

5.     Permite conservar la individualidad a la esposa.

6.     Observa una buena relación con su madre. Y que reconozca sus obligaciones con ella.

7.     Ser un esposo amante toda la vida.

El matrimonio es una institución divina la cual exige un compromiso que esté aprobado por Dios. La armonía en el hogar es directamente proporcional con la relación con Dios.

“Cada paso dado hacia el matrimonio, debe ser acompañado de modestia, sencillez y sinceridad, así como del serio propósito de agradar a Dios”

Referencia:

 White, E. (2007) El hogar cristiano, Asociación Casa Publicadora Sudamericana, capitulo 6, Edición digital